Cuando a una persona le diagnostican un cáncer y le plantean su tratamiento médico, en ese momento lo que más le preocupa es su vida y recuperarse. Hasta que no va desarrollándose todo el proceso desconoce todos los efectos secundarios que le van a acontecer tras tu tratamiento médico. Yo siempre digo que el paciente va asimilando poco a poco y por orden los acontecimientos y pienso de veras que es una buena forma de hacerlo, ver todo paso por paso y no mirando a lo lejos todo el camino que le queda por recorrer. Así ocurre también con los cambios estéticos, el que más preocupa en un primer momento, y por el que la persona acude a un centro especializado, es la caída de su cabello, la elección de una peluca. De hecho, es una de las preguntas que realiza a su médico “ ¿Se me va a caer el cabello? Y la respuesta es " Si, le recomiendo que vaya mirando una peluca" En los 15 años que llevo trabajando en estética oncológica, la mayoría de las personas que acuden a mi centro, lo que más le preocupa es la caída de su cabello y les angustia no dar con una peluca similar a su imagen. Los demás efectos secundarios pasan a un segundo plano y prefieren abordarlos tras la adaptación y colocación de la peluca. Lo curioso es que la peluca es sin duda la gran protagonista y a la vez, la gran desconocida. Y por ello requiere información y tiempo para su elección. No olvidemos que va a acompañar al paciente durante toda su enfermedad. Para elegir la peluca adecuada se tiene que tener en cuenta desde la imagen de la persona, el confort, los hábitos de vida, su uso y mantenimiento, el presupuesto que tiene, etc. Todas estas cosas a tener en cuenta para elegir una peluca, tienen mucho que ver con el tipo de peluca y el material con el que está confeccionada, es decir, si es de cabello natural o de cabello sintético. Además, la elección de la textura del cabello determinará un tipo de color, de imagen, de confort y de mantenimiento, y por ello es muy importante saber las diferencias antes de elegir la peluca. En este artículo queremos proporcionaros las diferencias básicas entre ambas pelucas, para facilitaros la elección y quitaros un poco la angustia ante algo desconocido y tan necesario. Es importante también plantearos si queréis mantener la imagen o cambiarla a la hora de elegir vuestra peluca, así cuando acudáis al centro a elegirla será más fácil. Las principales características de una peluca de cabello natural podríamos decir que son:
Es lo más parecido a nuestro cabello y al igual que hacemos con el nuestro podemos modificar su forma, rizar o alisar, podemos cambiar su color, hacer mechas, etc. Usar un peluca de cabello natural es lo más parecido a ir a la peluquería, pero siempre con las limitaciones que tiene un cabello sin vida propia.
Podemos elegir también el tipo de cabello, calidad, grosor y densidad. Esto permite conseguir la textura muy personalizada y que la persona se sienta muy identificada con la peluca, porque es lo más parecido a su imagen.
La duración de la peluca en tiempo es mayor y se puede realizar arreglos en zonas concretas.
Como a nuestro cabello, los cambios climatológicos le afectan y por ello hay que utilizar productos específicos para texturizar el cabello y cuidarlo.
El mantenimiento requiere más cuidado , por ello la persona debe de conocer bien su uso y estar bien formada para realizar el cuidado. Sino es así ,es preferible que acuda a un centro especializado en estética oncológica para su puesta a punto quincenal o mensual.
El precio de este tipo de pelucas es más elevado.
Los estilos de cabello rizadoestán más conseguidos en las pelucas de cabello natural, no olvidemos que el trabajo de moldear el cabello lo realiza una profesional y puede utilizar diferentes tamaños de rulos según la onda que quiera conseguir. En las melenas largas yo aconsejo también cabello natural, porque se deterioran menos, el movimiento y la caída es mas natural.
Las principales características básicas de una peluca cabello sintético son:
El peinado, forma y color no podrán variarse. Al tratarse de una fibra sintética no podemos teñir ni peinar con herramientas de calor porque se estropearía. La persona siempre irá con la misma forma peinada y no le afectará los cambio atmosféricos. Si se podrá realizar corte que personalice la imagen de la persona y también se podrán usar complementos para el cabello, para verse un poco más diferente.
El mantenimiento es más sencillo, se puede realizar en casa y sólo requiere de varios puntos importantes: no lavar con agua caliente siempre fría y nunca secar con herramientas de peinado, ni dar calor directo. lo mejor es dejar colocada en la cabeza y que se seque al aire, es por ello conveniente tener en cuenta el tiempo que tarda y cuando la necesita lista. Se debe utilizar champú y acondicionador hidratantes. Video lavado peluca sintética
Existen una gran de variedad de modelos en el mercado que permiten cubrir la mayoría de las necesidades de color, corte y estilo.
Los estilos de cabellos más cortos para mi gusto están más conseguidos en la pelucas de cabello sintético, la nuca queda más pegada y el movimiento del cabello es más natural. Las melenas si sobrepasan el hombro y rozan en la espalda se deterioran con más facilidad que el cabello natural y queda un aspecto de puntas secas, estropeadas e incluso algunos mechones como rastas.
Cuando vayamos a elegir una peluca tendremos que tener en cuenta estas características técnicas y algo más intuitivo, como es la propia sensación que nos aporta la peluca, como nos encontramos con ella , sentirnos identificada con ella y sobretodo muy guapa. No puede prevalecer la comodidad por encima de la belleza, sino que tiene que convivir y estar de una manera equilibrada. Esto es lo que permitir que acompañe a la persona durante todo el tratamiento y la haga sentirse segura, bien y muy guapa, no olvidemos que el vernos bien contribuye en nuestra autoestima, en nuestra recuperación y nos ayudan a normalizar la situación.